De Corazón a corazón: Heb 10,1-10 ("Al entrar en el mundo dice: No has querido sacrificio, pero me has formado un cuerpo… Vengo para hacer tu voluntad"); Mc 3,31-35 ("Quien cumple la voluntad de Dios, ése es mi hermano, mi hermana y mi madre")

Contemplación, vivencia, misión: La actitud filial de Jesús, desde el día de la Encarnación (cfr. Heb 10,7), continuó toda su vida ("sí, Padre": Lc 10,21), hasta el momento final: "Padre, en tus manos" (Lc 23,46). El Espíritu Santo comunicó esta actitud a María, desde su "sí" (Lc 1,38), hasta el momento en que "estaba de pie junto a la Cruz" (Jn 19,25).

En el día a día con la Madre de Jesús: La "Madre" de Jesús es figura de una Iglesia, también madre, por hacer de la vida un sí permanente (cfr. Mc 3,35).
AÑO DE LA FE:  "María entra en un diálogo íntimo con la Palabra de Dios que le ha sido anunciada, no la tiene por superficial, sino la profundiza, la deja penetrar en su mente y en su corazón para entender lo que el Señor quiere de ella, el sentido del anuncio" (Benedicto XVI, catequesis 19 dic. 2012).